Muchos de nosotros decimos a menudo «No puedo dormir» y es que quizás no estemos preparando el momento del sueño adecuadamente. Por lo general nuestro cuerpo al final del día debería estar cansado y no nos tendría que costar dormir. Si este no es el caso, para que nuestro cuerpo se relaje y pueda descansar durante la noche lo mejor es practicar algunas técnicas de relajación para dormir o meditación para dormir, así como tener una serie de indicaciones en cuenta.
Cómo dormir mejor
Los medicamentos para dormir no son una buena solución para este problema, a no ser que ya se haya agravado lo suficiente y tengáis que acudir a vuestro médico que será quien os lo recete, siempre bajo vigilancia médica. Tomarlos por vuestra cuenta perjudicará vuestra salud y hará que vuestro cuerpo se acostumbre a dormir de esta manera sin conciliar el sueño de forma natural.
A continuación os damos una serie de trucos para dormir mejor.
1. Establece una rutina de sueño
Del mismo modo que tu cuerpo se acostumbra a unos horarios para comer, puedes acostumbrarlo a dormir con una rutina adecuada. Ves a la cama cada día a la misma hora y apaga la luz para irte a dormir. No hagas ningún tipo de actividad que pueda activar tu mente, si no no lo conseguirás.
2. Disfruta de un baño relajante antes de dormir
Aprovecha y tómate un tiempo para ti mismo, prepara un baño relajante o una ducha con agua templada y pon algunas velas o sales de frutas. Esto ayudará a relajar tu cuerpo y a que desconectes del estrés y del ritmo acelerado del trabajo y la rutina. Piensa en cosas alegres y olvídate de los problemas.
3. Regula la temperatura de tu dormitorio
Sufrir mucho calor mientras duermes o mucho frío no te ayudará a que tu cuerpo descanse. El excesivo calor puede generar incluso pesadillas durante el sueño y es fácil que te desveles por esto. Dormir bajo el aire acondicionado o mal tapado puede enfriar el cuerpo y causar lesiones musculares por culpa del enfriamiento. Intenta acondicionar la temperatura de la habitación de forma natural cambiando la ropa de cama o abriendo las ventanas según sea necesario. Dormirás mucho mejor.
4. Decora tu dormitorio de forma agradable
Aunque no lo creas los colores con los que hayas pintado tu dormitorio, la organización, ventilación e iluminación afectan a la hora de dormir. Descansar en un lugar estresante donde los colores son agresivos, no hay limpieza y mala ventilación puede alterar el sueño. Utiliza colores claros y suaves para las paredes y sobre todo evita el desorden y la mala ventilación.
5. Elige un buen colchón
El colchón es el que nos soporta cada día mientras dormimos, por ello debe estar en buenas condiciones y lo suficientemente firme para que nuestra columna y las zonas más pensadas del cuerpo permanezcan con un buen apoyo. Un colchón excesivamente blanco o rígido hará que durmamos mal y perjudicará nuestro bienestar. Acude a los especialistas que te aconsejarán cuál es el colchón más adecuado para lo que necesitas.
6. Cena ligera
Siempre se ha dicho que lo mejor para cenar es comer algo ligero, ya que por la noche se queman menos calorías que durante el día. Además cenar algo ligero te beneficiará porque podrás dormir mejor sintiéndote menos hinchado, al hacer una rápida digestión y sin sentirte hambriento.
7. Evita los ruidos molestos
Si tus vecinos hacen ruido a la hora de dormir, escuchas jaleo en la calle o tu pareja ronca, opta por utilizar tapones para las orejas. Te ayudarán a conciliar el sueño y a no desvelarte durante la noche.
8. Música relajante para dormir
Tanto si no tienes sueño antes de irte a dormir como si te has desvelado durante la noche, aprovecha para practicar algunas técnicas para dormir. Éstas debes hacerlas fuera de la habitación donde vayas a dormir, pues sólo debes usarla para esto. Túmbate en el sofá y escucha algo de música relajante para dormir, en tu propio móvil encontrarás apps que te proporcionarán canciones para esto. Hay muchos tipos de música para dormir y relajarse, como son los sonidos de la naturaleza o la música clásica para dormir que no tiene ritmos tan vivos.
Otra opción es la lectura, encuentra un libro que no te sea muy interesante y comienza a leerlo. Hay algunos autores que también han preparado cuentos para dormir para adultos. Una vez sientas el sueño aprovecha para ir a la cama.
Como última opción también puedes tomar infusiones para dormir, previamente a la relajación para dormir que hemos indicado. Estos remedios naturales a menudo funcionan.